La mayoría de nosotros utilizamos la mano derecha para realizar tareas cotidianas. Concretamente, el 88% de la población es diestro, mientras que el 12% restante es zurdo. Pero ¿por qué es así? En este artículo, exploraremos las posibles causas detrás de la prevalencia de la diestrez en la población mundial respecto de los zurdos; desde factores genéticos hasta culturales.
FACTORES GENÉTICOS
La investigación ha demostrado que la lateralidad está influenciada por la genética. Hay ciertos genes que se han relacionado con la lateralidad, lo que sugiere que la herencia es un factor importante en la determinación de si una persona es diestra o zurda. Si bien todavía hay mucho que aprender sobre cómo influyen estos genes en la lateralidad, se sabe que la predisposición genética juega un papel en la determinación de la mano dominante.
FACTORES AMBIENTALES
Además de los factores genéticos, también existen factores ambientales que pueden influir en la lateralidad. Por ejemplo, se ha observado que ciertas lesiones cerebrales, infecciones, exposición a toxinas y estrés prenatal pueden afectar el desarrollo del cerebro y la lateralidad. Estos factores ambientales pueden llevar a una mayor incidencia de zurdera en ciertas poblaciones.
FACTORES CULTURALES
Aunque los factores genéticos y ambientales pueden influir en la lateralidad, también existen factores culturales que pueden influir en la prevalencia de la diestrez en la población mundial. En algunas culturas, la zurdera se considera una desviación de la norma y puede desalentarse o incluso prohibirse. En algunas culturas incluso se considera a los zurdos como portadores de mal agüero o que están dominados por el diablo. Estos factores pueden llevar a que los zurdos aprendan a usar la mano derecha para adaptarse a las expectativas culturales.
¿LO SABÍAS?
La lateralidad no es exclusiva de los humanos. También se da en muchos animales
En resumen, la prevalencia de la mano derecha dominante en la población mundial es mayor que la de la mano izquierda dominante debido a una combinación de factores genéticos, ambientales y culturales.
Aunque todavía hay mucho que aprender sobre cómo estos factores influyen en la lateralidad, está claro que la mano dominante es una parte importante de nuestra identidad y que la diestrez sigue siendo la norma en la mayoría de las culturas en todo el mundo.